02 / El afiche de Facundo Cabral
Más de mil palabras…
El afiche de Facundo Cabral
Texto / René Vázquez – Fotografía / Enrique Manterola Dávila
Allá por los setentas
Conocí a Facundo Cabral por televisión, se presentó en algún programa musical tocando un caparazón de tortuga, recitó y cantó varios temas, entre ellos el Sermón de La Montaña, qué belleza escucharlo, entonces supe que No Soy de Aquí ni Soy de Allá era de él, la cantaba Alberto Cortez.
El primer encuentro
Después de una presentación en esos años en el Teatro Degollado, mi hermano y yo fuimos a verlo, nos esperamos al final para platicar con él, mi hermano le mostró un libro que estaba escribiendo, en eso una señora le pidió un consejo sobre su hijo, pues andaba en malos pasos, él le comentó que le promoviera sueños, “–mira este muchacho, a su edad está escribiendo un libro, así con tu hijo ponlo a cantar, a escribir, a pintar…”
El segundo encuentro
Creo fue en 1987 cuando Facundo Cabral se presentó en el Instituto Cultural Cabañas, después del concierto lo visité en camerino, esperé a ser de los últimos para entrevistarlo.
Le pregunté que él había sido un cantante de protesta y Argentina había recuperado la democracia, ¿entonces cuál sería ahora su su canto? a lo que respondió: –la protesta ahora será propuesta.
Yo llevaba cartel cubierto con una cartulina de su primer presentación en Guadalajara, lo tomó y realizó un dibujo de él mismo en caricatura viendo a una flor.
Le comenté que en realidad quería su autógrafo en el cartel; lo vio, se paró sorprendido y me preguntó:
-Tú lo diseñaste?
-No, lo diseñó Alejandro Servín, fue para su primer concierto en el Teatro Degollado de Guadalajara en los setentas.
-Yo he dado muchos conciertos en todo el mundo, y siempre llevo a mi casa, en Argentina, los programas de mano y los materiales promocionales de mis presentaciones.
Mi mamá en su sala sólo tiene dos afiches, uno donde estoy con Indira Gandhi, de un concierto en la India y éste.
Platicamos algunas cosas más y me despedí, Enrique Manterola Dávila, mi amigo fotógrafo que estaba en la salida me pidió tomar la foto.
Gracias a él quedó documentada la experiencia.
Hola que historia tan linda una de tantas qué has vivido gracias por compartir tu bella experkensa ehhsa
ResponderBorrarMuchas gracias por el comentario, saludos
BorrarQue padre experiencia!
ResponderBorrarMe mueve a compartir algo que escribí en julio de 2011, a raíz del desafortunado suceso en que Facundo perdió la vida...
Queridos amigos:
Como ya todos han de saber, el sabado pasado han segado la vida de un buen hombre: Facundo Cabral. Cantor de historias, trotamundos, mas alla de gustos y disgustos musicales, era de esas gentes por las que vale aun la pena (ya menos) que el mundo sea mundo. La noticia de su muerte me ha dejado profundamente consternado, sobre todo por las circunstancias violentas (¿acaso no se puede morir de otra forma en estos dias?) en que se dio.
El triste suceso tuvo lugar en Quetzaltenango, una ciudad de Guatemala, pero bien pudo haber sido en Morelia, o en Monterrey.... o en Guadalajara, en esta region (¡ Qué digo region, en esta TIERRA!) nuestra desgarrada por el odio y la ambicion ciega...
En fin, que tal noticia me ha arrancado del alma unas palabras dolidas que quiero compartir con ustedes.
saludos y un abrazo, y que el horror y la inopia de estos tiempos, no nos robe la alegria, y el abrazo, y el encuentro.
saludos... y adelante
su amigo
pepe ochoa.
“Cuando un amigo se va
Galopando su destino
Empieza el alma a vibrar
Por que se llena de frio”
ALBERTO CORTEZ
“Que no calle el cantor
porque el silencio cobarde
apaña la maldad que oprime.
No saben los cantores de agachadas,
no callarán jamás de frente al crimen.
…
Si se calla el cantor... calla la vida.”
SI SE CALLA EL CANTOR - HORACIO GUARANY
Y llegó el día en que te fuiste…
Te mataron Facundo, ¡Que tristeza!
No me cabe en el alma tu agonía.
Te callaron la voz, y los caminos
Te cortaron la vida que no pudo
Ni un pesar, ni la pobreza, ni el maligno
Tumor que se anidaba en tus entrañas
Nos falta ya tu paz, tu cantar, tus buenas risas
Y es que de eso (de todo eso) estos tiempos adolecen
Ahora (dicen) darán con los sinnombre
“Buscarán hasta debajo de las balas”.
No hace falta, sabemos ya quien hizo
Tan atroz acto en las sombras
Dejando el alma colgada del perchero
¡Te mato este mundo, Cabral!
Yo lo confieso
Este mundo cabrón jaló el gatillo
Este mundo donde el Mal sentó cabeza
Este mundo donde estorban
La paz, el amor y la nobleza.
¿No por eso eras tú un paria errante
Por caminos, veredas y fronteras?
No había almohada para ti en estas tierras
Donde solo el ladrón halla posada
Vuele alto,
cantor del nuevo día
Que aquí y allá, allá y aquí
Tu serás para siempre luz festiva
Y un tizón encendido en las entrañas
De los que, aún en este mundo,
No compramos, ni vendemos
Y andamos por los caminos
Que andan tras la justicia.
11-07-2011
Gracias por compartir tu texto.
BorrarAún duele su partida.